'LAS AMISTADES PELIGROSAS' NO PUEDO EVITARLO... LA ADORO. NO PUEDO EVITARLO

Dangerous Liaisons 1988
Director: Stephen Frears
Reparto: Glenn Close, John Malkovich, Michelle Pfeiffer, Uma Thurman, Keanu Reeves...

De las muchas adaptaciones -y versiones- que hay de esta novela del XVIII francés, para mi la mejor es y será siempre la que hizo Stephen Freas. Primero por el magnifico guión, adaptado de manera extraordinaria por Christopher Hampton, tanto que mereció el Oscar.
Segundo por su calidad técnica, planos muy descriptivos, que revelan en cada momento lo que el director quiere que el espectador vea y primeros planos que no saturan y provocan una tensión inusitada, pero sin ser cargante.
Por ultimo, contar con un elenco de portentos interpretativos y ahí esta, una película para la filmoteca, para verla siempre que se te antoje sin cansarte.
Glenn Close y John Malkovich son los principales y tengo que decirlo, mejores de esta obra maestra.

El argumento gira en torno a una venganza que quiere llevar a cabo la Marquesa de Merteuil (Glenn Close) recurriendo a un antiguo amante y buen amigo, el vizconde de Valmont (John Malkovich) En el punto de mira de esa venganza, el ultimo amante de la marquesa que planea casarse con la virtuosa e inocente hija de Madame de Volanges, Cecile (Uma Thurman). Ambos urdirán un frívolo y malicioso plan para arruinar dicho casamiento. Mientras tanto, Valmont se enamora de una entregada mujer casada, madame de Tourvel (Michelle Pfeiffer) quién se verá involucrada en las pérfidas maniobras de la marquesa.

Los juegos de seducción, la falta total de moral, lo fácil que es manipular a las personas cuando se tienen los recursos y el carisma necesario, y la mezquindad del ser humano se sacan a relucir en este maravilloso film que atrapa desde el minuto uno hasta el final.

Poderosas interpretaciones las de Close y Malkovich, una mostrándose fría y calculadora, la maldad hecha mujer. Y el otro, ay el otro, cuya psicología asusta y divierte al mismo tiempo; el cinismo del vizconde llega a limites insospechados, pero aún así, te rindes a sus encantos. Sublimes. Sinceramente, ambos debieron ganar un Oscar por tan gratificante actuación, en especial Glenn Close. 

Claro que la Pfeiffer no se queda corta, aquí esta... Ojalá encontrara una sola palabra para definir la maravilla de actuación; la ves vulnerable, débil, dulce, confusa y sensual... brillante.

Todo ello envuelto en una sensacional combinación de vestuario, maquillaje, decoración y fotografía que otorgan a la película una veracidad con mayúsculas, y que se remata con una perfecta partitura de George Fenton que hacen que no pueda evitar considerarla una de mis 10 películas favoritas

Para terminar, tengo que puntualizar el momento cumbre de toda la película, los últimos minutos que Glenn Close está en pantalla (tranquilos los que no la habéis visto, no revelo nada) hay una emoción contenida y un retrato de su personaje que vale millones.

No puedo evitarlo... estoy enamorada de esta película, no puedo evitarlo